Hay algunas comprobaciones específicas para determinados tipos de vehículos como los taxis, los cuales deben someterse a evaluaciones adicionales a las del resto de vehículos. AECA-ITV explica en qué consisten estas diferencias.
El taxi es un servicio público de transporte de personas y, como tal, está sometido a una serie de controles que garanticen su seguridad. Uno de ellos es la inspección técnica la cual deben realizar una vez al año durante los 5 primeros años desde la matriculación del vehículo y, posteriormente, cada 6 meses.
En líneas generales un vehículo destinado al servicio de taxi debe someterse a los mismos controles que cualquier otro turismo, es decir, inspección de la carrocería, de los neumáticos, del sistema de frenos, de luces y señalización, emisiones de gases contaminantes, entre otros. Sin embargo, hay una prueba a la que solo este tipo de vehículos debe someterse: el control metrológico que se realiza al sistema taquicronométrico, es decir, la instalación del taxímetro y sus periféricos.
Revisión del taxímetro
Todos los taxis están obligados a pasar la verificación metrológica del taxímetro después de cualquier modificación o cambio de tarifas. Sin embargo, este control no exime al vehículo de tener que pasar también la ITV. Es durante este proceso cuando se realiza la revisión metrológica del taxímetro, tanto con velocímetro, como con cronómetro, para el control horario, comprobando así que las tarifas introducidas en el equipo están dentro de los valores admisibles.
El usuario puede comprobar que el taxi está al día con la ITV
La inspección técnica en los taxis, así como en cualquier otro tipo de vehículo, tiene como objetivo garantizar que los vehículos cumplen con los estándares mínimos de seguridad y de protección del medio ambiente para circular. Por ello, es clave que los usuarios puedan saber a la hora de usar este servicio público si dicho taxi está o no al día con la ITV.
El usuario puede fijarse en las pegatinas de color blanco que están situadas en el propio aparato taxímetro y en la esquina inferior derecha de la ventanilla de la puerta trasera derecha. Estas pegatinas nos indican si está vigente la verificación del taxímetro ya que cuentan con una fecha que es válida por un año. En caso de haber sido desfavorable la inspección, el taxímetro llevará colocada una pegatina de color rojo indicando su fuera de uso, no pudiendo trabajar hasta la subsanación del defecto que pudiera tener.
Fuente: www.aeca-itv.com/
